El mundo laboral ha dado un giro de 180º en los últimos años, la evolución que ha tenido en la era digital ha transformado las prioridades de las personas y de las organizaciones cambiando el enfoque de lo que era poco importante a lo que ahora es esencial.
Anteriormente ofrecer un salario competitivo, retos laborales, crecimiento profesional dentro de la organización, prestaciones y bonos económicos eran suficiente para mantener a un colaborador en la organización. Hoy, las cosas han cambiado.
Ya no basta con ofrecer un salario competitivo; los profesionales buscan empresas que les ofrezcan más: desarrollo profesional, equilibrio personal y un entorno laboral que valore su bienestar integral. Este cambio ha dado lugar a un nuevo paradigma que combina empleabilidad y bienestar como ejes estratégicos para atraer y retener talento dentro de las empresas.
En la era digital las personas están más preparadas en conocimientos técnicos pero también en trabajo personal. No solo cuentan con más habilidades y recursos para desempeñar un puesto sino también el trabajo personal los ha llevado a conocer su valor y sus límites lo que lleva a que no se conformen con menos de lo que creen que se merecen.
Hoy en día el término empleabilidad cobra sentido y se toma de manera literal. Las nuevas generaciones de talento toman el conjunto de habilidades, competencias, conocimientos, actitudes y características personales que se esperan de ellos de manera seria. Cada vez las personas más jóvenes cuentan con mayor preparación para cubrir las expectativas de las empresas.
Esto, impulsa a las organizaciones a cambiar el enfoque de lo importante y plantearse diferentes estratégias para cubrir con las exigencias de la nueva generación de empleados. Ahora te estarás preguntando, pero ¿qué cambios necesita mi organización para atraer y retener a este nuevo talento?
No te preocupes, la respuesta es simple y las organizaciones se han logrado adaptar de manera eficiente y tú también lo puedes hacer. Todo se resume en una palabra clave: bienestar.
El bienestar ya no es solo un beneficio adicional, se ha convertido en una prioridad, es ahora una necesidad básica para los trabajadores. Las organizaciones que priorizan la salud física, mental y emocional de sus empleados no solo mejoran la productividad, sino que también fortalecen la lealtad y el sentido de pertenencia.
Invertir en la formación continua de tus empleados, adoptar estratégias que generen valor mutuo, diseñar planes personalizados de crecimiento profesional, proveer oportunidades de cambio dentro de la organización son cosas que seguramente ya estás haciendo.
Ahora como nosotros, te invito a convertirte en un gran lugar para trabajar. Implementa flexibilidad laboral, programas de salud mental, actividades de integración y bienestar, fomenta una cultura inclusiva. Tomate el tiempo para entender las necesidades de tus empleados más allá de lo profesional y actúa en consecuencia.
La combinación de empleabilidad y bienestar no es solo una tendencia pasajera, es una estrategia a largo plazo que asegura la sostenibilidad de las organizaciones. Cuando las empresas invierten en el desarrollo profesional y personal de sus empleados, no solo ganan talento capacitado, sino también equipos comprometidos y alineados con los objetivos de la organización.
El desafío actual no es solo atraer talento, sino crear un entorno donde las personas quieran quedarse, crecer y prosperar. En la era digital, el éxito de una empresa no se mide únicamente por sus resultados financieros, sino también por la capacidad de poner a las personas en el centro de su estrategia.
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